Da una segunda vida a los tejidos de lujo.
En el centro de Biarritz, la boutique “Venitz” donde trabaja Morgane da una segunda vida a los tejidos de las casas de moda. Brut pasó un día allí.
“A los 33 años dejé París. Salí del apartamento. Subí al gato a bordo. Cargué las telas, que llenaron la mitad del camión, y comencé a hacer cosas de nuevo. Conocí a Rudy, con quien hoy hago la aventura de Venitz”.
“Son prácticamente retazos de tela de una casa de moda”
Morgane, costurera en el sector del lujo desde hace casi 14 años en París, trabaja actualmente en una boutique de segunda mano en Biarritz. Con retazos de telas de casas de moda crea piezas originales y únicas.
Para encontrar el tejido perfecto, Morgane suele pasear por el mercadillo de Saint-Ouen y por los mercadillos. A la hora de elegir ropa, la costurera prefiere las tiendas de segunda mano y los sitios web.
Si hay algo que le gusta de su trabajo es “ recuperar algo crudo, dañado y transformarlo de una manera un poco lujosa. Me encanta este contraste”, explica Morgane.